lunes, 3 de octubre de 2011

Mario Abel Fernández Juárez


Mario Abel Fernández Juárez


Ciudad de humo

Ciudad de gente que se difumina
en el aire de tus calles,
que encadena con su respirar turbio,
que alimenta de hambre y oropel;
de asombros importados que desvisten de pueblo,
que me alimentas de sueños humo.